La tradición no se pierde, se transmite de generación en generación y se fortalece actualizándose.
La Navidad queretana es una de las más hermosas del país, junto con las de otras entidades, visítala.
Querétaro capital y como entidad, tiene tradiciones en cada una de las épocas del año, pero cuando llega diciembre, luego de haber atendido con devoción y con fe y con patriotismo a las fiestas patrias y luego a los difuntos en el mes de noviembre, se prepara con toda la capacidad y la tradición de la queretanidad, para darle paso a las festividades de Navidad y de fin de año, adornando los principales espacios públicos, interpretando con ritmo y con armonía el sentimiento de unidad y convivencia que caracteriza a los habitantes de esta ciudad.
Por lo pronto, al terminar noviembre y dar inicio el mes de diciembre, ya hay Nochebuenas y luces multicolores por todo el Centro de la Ciudad, y como por arte de magia la gente de Servicios Municipales del gobierno queretano que comanda Felipe Fernando Macías Olvera, en cada amanecer deja huella de su trabajo, sobre todo ahora los que se dedican a colocar el alumbrado y los que tienen la responsabilidad de la jardinería, dándole un aspecto festivo sobre todo al Centro Histórico, pero también en los barrios se respeta la tradición y la idiosincrasia de cada rumbo de la ciudad.
Así es que si usted es de los que gustan de caminar la capital queretana, ya se encuentra con cientos o miles de Nochebuenas, en plazas y jardines, empiezan a aparecer los nacimientos, los eventos alegres con villancicos y música clásica propia de la época empieza a escucharse por todas partes… y llama la atención conforme avanzan las sombras de la noche, la gran cantidad de luces que se tienen en algunas calles, como Madero, y los jardines Plaza de Armas y Jardín Guerrero o bien el Jardín Zenea… y se espera con ansia el anuncio del encendido del árbol de la amistad que se yergue majestuoso en el Jardín de la Corregidora.
Un tema que es propio de las familias queretanas, es sin duda los desfiles de carros, que algunos de ellos son el pregón de las fiestas de la Navidad, y hay edades en todas estas tradiciones, algunos hablan de 96 años de los carros… pero los carros bíblicos, estos cumplen 196 años de que hacen su recorrido por la ciudad, así como la tradición del arrullo del Niño Dios.
Sin duda que los que nacieron y han vivido y disfrutado a Querétaro, aun hoy cuando está catalogada como una de las ciudades más caras de Latinoamérica, recuerdan al Querétaro risueño, cuando existían algunas cuantas industrias, cuando casi toda la gente se conocía y se reconocía, cuando la cultura, la música y sus instituciones eran ya destacadas a nivel local y nacional, una fama que siempre ha acompañado a esta ciudad patrimonio de la humanidad por la UNESCO.
El disfrute de las bellezas de Querétaro se conjuga ahora con las festividades navideñas, con su iluminación, con el buen gusto que le ponen los trabajadores del municipio, con las ideas de las diferentes dependencias encargadas de presumir a Querétaro como una ciudad en donde reina la seguridad, la armonía, la unidad y la convivencia empática entre sus habitantes… enhorabuena y a disfrutar de diciembre, al que hay que mencionarle aún las posadas en los barrios y comunidades, las festividades propias en cada una de las iglesias y santuarios, y desde luego esperar la llegada de miles de visitantes que reactiven la actividad económica, y que lleven en sus recuerdos y en sus memorias buenos recuerdos para transmitirlos a las nuevas generaciones o bien a sus familias y amigos para que siga Querétaro siendo un lugar de progreso.





