Por Andrea Peña
El candidato presidencial ecuatoriano, Fernando Villavicencio fue asesinado a tiros la tarde del miércoles en Quito mientras participaba en un acto de campaña.
El atentado se produjo en un colegio de la capital del que salía el aspirante, al que la mayoría de las encuestas situaban en cuarta o quinta posición entre los contrincantes que se disputarán la sucesión de Guillermo Lasso el próximo 20 de agosto.
El hoy occiso se presentaba como un ariete contra la corrupción bajo el eslogan «Es tiempo de valientes» y fue criticado por su actuación en el proceso de juicio político contra Lasso, ya que mientras fue integrante de la Asamblea hasta su disolución y presidía la comisión de fiscalización, emitió un informe favorable al mandatario que no tuvo el apoyo entre los demás legisladores.
El atentado se produce cuando faltan 11 días para las elecciones, amigo personal de Villavicencio, aseguró en un video difundido en redes sociales que el candidato murió tras ser alcanzado por los disparos, pese a que había sido trasladado a la Clínica de la Mujer, un centro médico cercano al sitio del tiroteo.
