El domingo de ramos, marca en el calendario católico, el fin de la cuaresma, y además reseña la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén, montado en un asno y recibido con palmas y olivos, que son símbolo de paz y son antecedentes del cristianismo, pues la historia reseña que las coronas de olivo ya se utilizaban en Roma y en Grecia, el ganar una de estas coronas era de alto honor.
En el Santuario de la Virgen de Guadalupe en San Juan del Río y prácticamente en todas las sedes parroquiales, se llevó a efecto este evento simbólico para el inicio de la Semana Santa, que se da en el sexto domingo de cuaresma, en donde se verifica una procesión y una bendición de las palmas, con las que se hacen espigas, cruces y muchos otros símbolos religiosos, que después de ser benditas normalmente se colocan detrás de las puertas o en lugares muy especiales para los fieles.
Que se hace con las palmas benditas luego de que estas terminan su ciclo, son entregadas a la iglesia y esta las convierte en ceniza, que se utiliza en el inicio de la cuaresma el Miércoles de ceniza.
Las palmas son símbolo de la fecundidad y riqueza en el pueblo judío, los comerciantes y los buenos tejedores de diferentes formas de las palmas, se dan cita afuera de las parroquias para ofrecer sus productos totalmente terminados… Las palmas viven su mejor tiempo en estos días pues son podadas de manera importante y esto les permite seguir teniendo más posibilidades de vida y desarrollo.
En el caso de Querétaro y sus 18 municipios, muchos de estos lugares son visitados por gente que viene de otras latitudes, pues la religiosidad de Querétaro es algo que se reconoce a nivel nacional, y por ello la difusión que se ha dado a los eventos de la Semana Mayor, que genera que venga gente de todas latitudes a pasar algunos días a un destino sin playa, pero que tiene todo para entretener a los visitantes y paseantes.