Escribe:-Fernando Roque
En los lejanos setentas y ochentas me tocó conocer a las principales vedettes de un México nocturno que ya desapareció (en parte por el temblor del 85): Gloriella, la princesa Yamal (Tamal, le decían los bromistas), Olga Breeskin, su violín y los animales que usaba en sus shows, la querida Wanda Seux, Arlette Pacheco, Lyn May, la princesa Lea (que se bañaba desnuda en una copa gigante), la queretana Ana Luisa Peluffo, Thelma Tixou et al. Hay que recordar que esta extravagante palabrita “vedette” es de origen francés y quiere decir “estrella”, refiriéndose a una artista completa: que bailaba, cantaba, actuaba, seducía y enseñaba algo de pielecita sin necesariamente encuerarse completamente (algunas como Lyn May si lo hacían en actos de Burlesque, palabra francesa que significa “burlesco”). Pues bien, como yo era un estudiante pobre y no tenía para viajar y viejar hasta la capirucha (y pagar uno de sus “shows”); las conocía por “Su otro yo”, “Caballero”, “Diva” y demás revistas educativas y a través del mal visto (pero que todos veíamos) cine de ficheras, dónde también se incorporaron la yugoslava Sasha Montenegro (látigo de un expresidente de mala fama pues lloraba mientras defendía el peso como un perro (pero chihuahueño) y la bellísima Angélica Chain (que en plan de chisme se retiró de la artisteada cuando se casó con un empresario milloneta). Estas películas, a pesar de ser tan criticadas, sostuvieron a la industria cinematográfica mexicana, las cuales aprovechaban cualquier momento para incluir números musicales amenizados por la Sonora Santanera (sobre todo con Perfume de gardenias “y” Luces de Nueva (Neza York), además de cómicos como Pedro Weber “Chatanuga”, el “caballo” Rojas, Alfonso Zayas Inclán, Carmencita Salinas, Rafael Inclán y otros. De estas grandes vedettes solo quedan recuerdos, sus películas y el estupendo documental “Bellas de Noche” (alusión a la cinta cabaretil) que dirigió la hija del dibujante José Luis Cuevas (también parodiado en una de estas cintas: “está tan feo como dibujo de José Luis Cuevas”). Este documental ha ganado premios y se presentó en Festivales de Cine. Búsquelo: le traerá gratos momentos de un país que se fue y de un cine mal hecho ¿verdad Güero Castro? pero divertidísimo y que a su manera reflejaba el relajo y amor a la vida del mexicano.
AQUEL TIEMPO DE VEDETTES
