- Una amiga le dice a otra amiga: ¿Qué tal va la vida de casada?
- Pues no me puedo quejar, dice ella.
- ¿O sea que va muy bien, no?
- No, no me puedo quejar porque mi marido está aquí al lado.
- Sale el doctor después de un parto y el padre de la criatura le pregunta:
- ¿Doctor cómo salió todo?
- El doctor le dice: todo salió bien, pero tuvimos que colocarle oxígeno al bebé.
- El padre, horrorizado, le dice: pero doctor, nosotros queríamos ponerle Gabriel.
¿Qué le dice un espagueti a otro? ¡El cuerpo me pide salsa!»