Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería. 40 años.
Como cada año, sin falta y con renovadas ansias de llegar al territorio de los libros en la Ciudad de México, me presenté el fin de semana pasado a la “FIL del Palacio de Minería” en su aniversario número cuarenta. Nostálgica visita sin duda, recordando mis años de secundaria, preparatoria y universidad, cuándo en la Ciudad de México, entre semana y después de clases, visitaba esta Feria de Libro, toda la tarde, siempre repleta de stands de variada índole literaria. Es un deleite andar por los pasillos históricos del bello “Palacio de Minería”, que con algarabía y asombro, nos encontramos con escritores que admiramos y amablemente nos regalan, un encuentro memorable entre consejos literarios y firmas de ejemplares de ediciones novedosas. Puedo opinar que esta feria del Palacio de Minería es la más entrañable y agradable de todas las que se presentan en México. Sin el tufo político y monstruoso de la “FIL de Guadalajara” que ha sido tomada como plataforma de todo menos de promoción de la lectura, dónde las declaraciones políticas, pesan más que las novedades literarias, obvio, tiene el poder de convocatoria sin comparación, pero un lector de verdad busca dialogar con las letras y descubrir nuevas opciones literarias, así como, retomar los clásicos, y no, ver al politiquillo de moda, declarar cosas, que en ocasiones la lectura es su última preocupación, ejemplos sobran. Más ferias del libro necesitamos, sí, pero, que la iniciativa privada participe, es lamentable que buenas ideas de promoción de la lectura, se enfrenten a diario, con una realidad dónde el presupuesto público y editoriales monopolizadoras, sean las que “organicen” Ferias del Libro, siempre con enfoque político y comercial, en detrimento de la calidad y el diálogo entre escritor y lectores, que es en esencia el objetivo original de esas ferias de libro, es el diálogo entre el que publica, lee, y difunde. Ojalá, que los grupos empresariales en San Juan del Río, Querétaro y demás ciudades cercanas, apoyen la promoción de estos eventos en otros escenarios y con otras voces, más allá del oficialismo y el monopolio editorial, que impide el desarrollo de más propuestas literarias. Si tienen la oportunidad de visitar la “Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería”, en su edición cuarenta. Será una buena experiencia, la UNAM y otros sectores de la iniciativa privada lo han logrado, esperemos ver algo así pronto por nuestras tierras. Les dejo mi Twitter: @robercachoa ¡Todo bien!