*** La apuesta de poner a Amealco en el ojo del Mundo, ha propiciado un crecimiento importante.
*** Las cifras dicen que Amealco ha crecido en un 150 por ciento en captación de turistas.
Por Raúl Rosillo Garfias
Tras el segundo informe de actividades del alcalde René Mejía Montoya, se empiezan a desglosar los datos en cada una de las áreas del gobierno municipal, y en el ramo del turismo se destaca que esta actividad creció el 150 por ciento, impactando al sector de los servicios, gracias a las festividades y programas que se han realizado y que superaron el 200 por ciento en comparación a lo que se venía haciendo.
El caso es que este municipio, se ha convertido en el centro de atracción para las inversiones en zonas de descanso, las cabañas, los camping y otras actividades que tienen que ver con la gastronomía, son sin duda actividades que han potencializado que la gente que gusta de ir a esta ciudad y a este municipio, encuentre que hacer y cómo entretenerse, además de que está cerca de todo, gracias a las excelentes vías de comunicación que existen.
El municipio es y se ha convertido en una zona muy segura, gracias a la hermandad que se ha mantenido con los municipios tanto del Estado de México como con los del Estado de Guanajuato y Michoacán, pero sobre todo porque se tiene a una policía eficiente y capacitada, tanto como la Guardia Nacional o la propia SEDENA que tienen ya una base de operaciones en la zona.
Además de que el contar con la Muñeca Lelé que se ha convertido en la embajadora de Amealco, de Querétaro y de México en el mundo, ha propiciado que en breve se dé a conocer la inversión que se tiene contemplada desde la Secretaría de Turismo para intervenir el Centro Recreativo, Cerro de los Gallos en donde se habla de varios millones y de un mejoramiento para fortalecer sus actividades, y con ello también darle más vida al Centro deportivo de Alto rendimiento que ya funciona en este municipio.
La visión que se tiene es de convertir a Amealco en un centro de atracción internacional, y esto desde luego no es fácil ni sencillo, reclama de trabajo, de visión y de exigencias que tienen que ver con la audacia y la capacidad de trascender.